jueves, 23 de febrero de 2012

Por ti y por mi.

Son mas de las cuatro de la mañana, se a donde me dirigo y se que tu me esperas. Llamo a la puerta y la abres entre las brumas del sueño, pero me esperabas.
Nos miramos unos segundos a los ojos y sin perder tiempo me agarras de la cintura hundiéndonos en un beso voraz, rápido, erótico, bestial, mientras cierras la puerta y me apoyas contra la pared, para nosotros el tiempo es oro.
Es en esos momentos cuando para mi las agujas del reloj ruedan a una velocidad descomunal, cuando solo siento ropa que desaparece, que cae, que se rompe mientras siento tus besos por la cara, por el cuello hasta mis pechos, cuando solo se sienten tus manos por todo mi cuerpo y mis manos tocando tu piel lisa. No necesitamos mas, rodeo mis piernas a tu cintura y nos llevas a los dos al paraíso, y me siento desfallecer, caer y solo quiero sentir tu respiración acelerada en mi oído, los suspiros que escapan de nuestros labios, los mordiscos suaves..Y caigo, caigo hasta que nos llevamos a un mundo de placer en el que morimos para volver a nacer.
Caemos rendidos en el suelo sin que importe nada mas. Pero cuando la conciencia vuelve los dos sabemos que no me puedo quedar.
Tan solo queda esperar a otro encuentro esporádico mas.

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